Es
una forma de eliminar los desechos de la sangre cuando los riñones ya no están
funcionando de manera correcta. Durante
la diálisis peritoneal, un líquido purificador circula a través de una sonda
hacia la parte del abdomen. El tejido que reviste el abdomen actúa como filtro
y quita los desechos de la sangre. Luego de un período de tiempo determinado,
el líquido con los desechos filtrados fluye hacia afuera del abdomen y se
descarta. Estos tratamientos se pueden hacer en casa, en el trabajo, o
viajando. Aunque esta práctica también conlleva riesgos como una infección en
el revestimiento abdominal (peritonitis) es una complicación frecuente de la
diálisis peritoneal. También se puede presentar una infección en el lugar donde
se inserta el catéter para llevar el líquido limpiador la retención de líquidos
en el abdomen durante largos períodos podría distender tus músculos y que la
absorción de cierta cantidad de solución para diálisis podría provocar que
consumas cientos de calorías de más en un día, lo que conduciría a un aumento
de peso.
En conclusión, las enfermedades al
riñón pueden ser muy complicada y que a pesar de tener tratamiento, muchas
veces estos mismos se pueden volver u tanto riesgosos.
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